Internacional
Operación “León Ascendente” golpea instalaciones nucleares y acaba con la cúpula militar iraní, en respuesta a presunta amenaza nuclear.
El ejército israelí llevó a cabo el 13 de junio una ofensiva aérea de gran envergadura contra Irán, utilizando alrededor de 200 aviones para atacar más de 100 objetivos estratégicos, incluyendo instalaciones nucleares y bases militares, según informó la prensa internacional. Entre las víctimas se cuentan altos mandos del Estado Mayor, como el general Mohammad Bagheri y el comandante en jefe de la Guardia Revolucionaria, Hossein Salami, junto a al menos seis científicos nucleares.
El perfil de las víctimas se ha ampliado con la confirmación de más de 20 mandos militares abatidos, incluidos los generales Gholamreza Mehrabi y Mehdi Rabbani, responsables de inteligencia y operaciones, respectivamente. Además, murieron destacados científicos del programa nuclear, lo que representa un golpe contundente a la estructura militar y tecnológica iraní.
Irán respondió de inmediato lanzando decenas de misiles y drones hacia Tel Aviv, aunque la mayoría fueron interceptados, causando algunos heridos y daños menores. El régimen iraní anunció además la muerte de más militares de alto rango y declaró luto oficial, mientras el líder supremo advirtió que Israel enfrentaría severas consecuencias.
Este ataque marca un antes y un después en la región: suspende las negociaciones nucleares entre Irán y EE.UU., redefine las alianzas en Oriente Medio y eleva el riesgo de un conflicto de mayor escala. Israel—apoyado por inteligencia propia y, según medios, evitando participación militar directa estadounidense—se posiciona como actor unilateral, mientras la comunidad internacional advierte sobre la posibilidad de una escalada dramática.
Fuente: INFOBAE